Nostalgia que mata

La soledad que deben vivir los inmigrantes, es una losa más a cargar junto con su responsabilidad de encontrar un empleo que de sustento a la familia abandonada en el hogar ya lejano. El miedo, la angustia, la depresión y la soledad son un cóctel que terminan por aniquilar la esperanza y la autoestima. Cada trabajador indocumentado debe vivir éste infierno, por el único delito de luchar por un empleo bien remunerado. Solo por citar un ejemplo, en el estado norteño de Durango, los sueldos son de apenas 600 pesos semanales en las empresas maquiladoras.

Ver video.